domingo, 7 de octubre de 2007

Testimonio de Samuel Esteban



En la foto uds pueden ver a Samuelito afuera de nuestra iglesia, justo cuando estaba dedicado a repartir unas mini tarjetas de invitación a nuestras reuniones a todas las personas que pasaban caminando.

En un comienzo no se atrevía a contactar a los transeúntes, pero un día oró al Señor para que no le dé vergüenza y luego empezó a hacerlo, hasta el punto que ahora dice que le gusta repartir las tarjetitas.

¡Todo un ejemplo!, ¿cierto?

4 comentarios:

Santiago Castro Leguizamón dijo...

Realmente eres todo un ejemplo, hijito precioso. Te felicito por integrar con tanta naturalidad tu alegría de vivir, tu fe en Dios y tus ansias por aprender nuevas cosas cada día.
Con cariño, tu papi

Anónimo dijo...

Lindo el Samuelito...
es tan hermoso ver a un niño creciendo en estatura pero también en la gracia y el conocimiento de Dios...
Dio bendiga a Samuel y se transforme un día en un hombre piadoso...
besitos cariñosos de la tía Nora

Anónimo dijo...

Samuelito..
estas muy grande^^
Bueno siempre fuiste un niño muy inteligente..cuando te veia aca en la iglesia cambiar en el p.c. la musica para las damas! me quede muy sorprendida!claro k tus papas muy reocupados en enseñarte eso y de las cosas de Dios!!
Asi esta tu amiguita Paz Belen...mucho mas grande y caminando tambien muy cerquita y tomadita de la mano del Señor!!
"dejad a los niños venid a mi!!
besitos de chocolate para ti..para tu hnita Susana!
tia patty...

Santiago Castro Leguizamón dijo...

Samuelito hijo:
recuerdo cuando te vi entregar invitaciones a unos señores chinos y ellos sonrieron y aceptaron el papelito... yo quedé pensando ¿cuánto te usará el Señor cuando seas maduro?
¿serás misionero?¿serás un adorador?¿serás un maestro, un evangelista?
Con amor, Mamá.